Desde pequeña siempre he sido una niña enamorazida, loca por encontrar a la persona a la que entregarle todo mi amor, y en el que desbordar toda mi capacidad de amar, es decir, mi príncipe azul. Y pensé que le había encontrado, que ya se había acabado mi búsqueda, porque desde 2010 solo puedo pensar en él...si, es verdad que es mucho tiempo, es verdad que ya debería haber pasado página, pero no puedo. Sigue ahí, presente cada día, cada hora, cada minuto...no hay día que no piense en él, o no le hable o busque el modo de poder encontrarme con él, esa semana o a la semana siguiente, pero que no pase mucho tiempo porque sino...sino algo falla. Pero, a pesar de eso, y a pesar de que yo me siento más suya que de nadie...él no es mío. Y eso...amigas lectoras (si es que tengo) no va a cambiar...nunca, nunca va a ser mio, solo así, a cachitos, a escondidas...entre las sombras. Pero de momento, soy feliz, le querría 100% para mí, pero le prefiero así a no tener nada de él.
Pero....aun así, y estando tan atada a él, quiero encontrar alguien, encontrar a mi príncipe azul, aquel que sea mío a todas horas, sin secretos, sin tener que escondernos, que toque mi pelo, que me hable con cariño, que me acaricie...que me mande mensajes a todas horas, que me diga que me quiere, pero que me quiere más allá de la amistad. Quiero mi media naranja, esa otra mitad que me complete y que me haga feliz, que me haga sentir ENAMORADA.
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